¿Qué es la ortopodología?
La Ortopodología es una parte esencial como elemento terapéutico en la práctica podológica, formando parte del plan de tratamiento.
Después de realizar la anamnesis y la exploración clínica, utilizando si son necesarias pruebas complementarias, podemos llegar a un diagnóstico y diseñar un plan de tratamiento en el que una de las alternativas conservadoras será la Ortopodología.
Con la Ortopodología podemos compensar alteraciones estructurales o funcionales de los pies y la extremidad inferior con objetivos a corto y largo plazo. A corto plazo buscaremos un efecto sobre la sintomatología y a largo plazo haremos prevención de las alteraciones secundarias que se derivan de estas alteraciones en la estructura o función de los pies y la extremidad inferior.
Disponemos de diferentes opciones de tratamiento ortopodológico:
Lo más habitual es comenzar con un estudio básico y si es necesario ampliarlo según cada caso o cada práctica deportiva.
Ortesis digitales
Las ortesis digitales son piezas confeccionadas con una base de silicona que utilizaremos para la protección y alineación de los dedos en conflictos digito-metatarsales. Existen tratamientos prefabricados que pueden dar problemas con el ajuste, por lo que se recomienda la confección de tratamientos a medida.
Soportes plantares
Los soportes plantares son el elemento estrella de la Ortopodología. Se trata de las tradicionales plantillas con las que podemos descargar puntos de conflicto o compensar alteraciones estructurales o funcionales del pie y la extremidad inferior que pueden tener repercusiones también a nivel del raquis.
Férulas
Las férulas podrán ser posturales o para la marcha. Las posturales buscarán mantener el pie, o parte del mismo, con una alineación adecuada permitiendo la descarga de puntos de conflicto o evitando posturas que puedan generar conflictos a largo plazo. Las férulas para la marcha serán aquellas que mantienen o ayudan al pie colocándolo en una posición más funcional.
Actuaciones sobre el calzado.
El calzado es un elemento básico en el tratamiento ortopodológico, formando parte del mismo. Es necesario que el calzado tenga unas características adecuadas para cada paciente y para cada tratamiento, incluso en ocasiones incorporamos elementos terapéuticos en el calzado.
